Conservation of Large, Nomadic Populations of White Ibises (Eudocimus albus) in the United States
Abstract
We compiled published and unpublished records of large nestings of White Ibises (Eudocimus albus) in the United States between 1930 and 1993. The resulting database provides evidence of at least four major geographic shifts of the breeding population of White Ibises during the period. Banding returns and colony histories demonstrate that the movements were not migratory. The extremely fast growth of most White Ibis breeding colonies indicates that local recruitment could not have fueled the large increases in breeding numbers in colonized areas. Ibises seem to colonize wetland areas that have good feeding resources and to abandon areas that lose the ability to supply this resource. Mechanisms of attraction to new sites and repulsion from degraded ones may work alone or in tandem. Degradation of breeding sites frequently occurs through natural processes, such as hurricanes, stochastic weather patterns, and wetland conditions, and the nomadic behavior of White Ibises appears to be an obligate life-history feature. Although surveys throughout the range of the U.S. population of White Ibises have never been comprehensive, available records indicate minimum breeding populations of 125,000 pairs in 1933, 170,000 pairs in 1976, and 51,000 pairs in 1991. The U.S. population as a whole appears to be decreasing. White Ibises share a suite of population, social, and movement characteristics with a number of nomadic species. Conservation strategies for these species may differ fundamentally from those targeting more sedentary species. Nomadic species may typically depend on large populations to find food and to stimulate breeding and are therefore likely to decline abruptly and unpredictably as habitat is lost or degraded. Rapid population declines may occur at population levels well above those predicted by genetic and minimum viability models. Because of its nomadic habit, the survival of this species may depend on a regional planning approach. To conserve this species we recommend a continuing commitment to the monitoring, assessment, and preservation of a mosaic of fresh and estuarine wetlands in the southeastern U.S.; the maintenance of natural disturbances needed to produce pulses of food in these wetlands, and the coordination of management efforts throughout the US., as well as between the U.S. and Cuba.En el presente trabajo compilamos registros, publicados y sin publicar, sobre grandes anidamientos de Ibises Blancas en los Estados Unidos entre 1930 y 1993. Las bases de datos resultantes proveen evidencia de por lo menos cuatro grandes cambios geográficos de la población reproductiva de Ibises Blancas durante este periodo. Los datos sobre la recuperación de bandas de marcado y las historias de las colonias demuestra que estos movimientos no fueron migratorios. El crecimiento extremadamente rápido de la mayoría de las colonias reproductivas de Ibises Blancas indica que el reclutamiento local no fué el responsable de los grandes incrementos en el número de reproductores en las áres colonizadas. Las Ibises parecen colonizar áreas de humedales que tienen buenos recursos alimenticios y abandonan áreas que pierden la habilidad para proveer estos recursos. Los mechanismos de atracción a los nuevos sitios y repulsión de los sitios degradados podrían actuar por si solos o en secuencia. La degradación de los sitios de crianza ocurre frecuentemente mediante procesos naturales tales como huracanes, patrones climáticos estocásticos y condiciones de los humedales. Es así que el comportamiento nomádico de las Ibises Blancas parece ser una característica forzosa de su historia natural Si bién los estudios a lo largo del área de distribución de la población de Ibises Blancas de los EEUU nunca han sido comprendidos, los registros disponibles indican que el tamaño minimo de las poblaciones reproductivas fue de 125,000 parejas en 1933, 170,000 parejas en 1976 y 51,000 parejas en 1991. La población de los EEUU parece estar decreciendo. Las Ibises Blancas comparten una serie de características poblacionales, sociales y de movimiento con varias especies nomádicas. Las estrategias de conservación para estas especies podrían diferir fundamentalmente de aquellas que estan destinadas a especies más sedentarias. Las especies nomadas podrían depender típicamente de grandes poblaciones para encontrar comida y estimular la crianza y son por lo tanto más susceptibles a declinar abruptamente e impredeciblemente a medida que el hábitat se pierde o se degrada. Declinaciones poblacionales muy rápidas pueden ocurrir a niveles poblacionales mucho mayores que aquellos predichos por los modelos genéticos y de viabilidad mínimos. Dado su hábito nomádico, la supervivencia de esta especie podría depender de una estrategia de planeamiento a nivél regional Con la finalidad de conservar esta especie nosotros recomendamos un compromiso continuo de monitoreo, evaluación y preservación de los mosaicos de humedales estuarinos y de agua dulce en el sudeste de EEUU; el mantenimiento de las perturbaciones naturales necesarias para producir los pulsos de recursos alimenticios en estos humedales y la coordinación de los esfuerzos de manejo a lo largo y ancho de los EEUU, así como también entre EEUU y Cuba.
- Publication:
-
Conservation Biology
- Pub Date:
- February 1996
- DOI:
- 10.1046/j.1523-1739.1996.10010203.x
- Bibcode:
- 1996ConBi..10..203F